-Hola soy Otto Dix- Dijo
Se quitó sus ojos de canica y los
arrojó a la bolsa con mil canicas más. La bolsa de canicas era ya un océano
infinito de oleajes furiosos. Las canicas-ojo se disolvían como líquidos
nerviosos, como si se hubieran transformado en serpientes que huyen de algo. Los colores se multiplicaron al ritmo de las olas que respondían a
los tenues rayos de luz. Tan tenues que parecían foquitos de árbol de Navidad
que comienzan a encender tímidamente.
-¿Quieres ver el mundo-
-Sí- Respondí neciamente
- Pues lo verás y no podrás dejar
de verlo ni muerto-
Sentí el abrasamiento del fuego, que
lloraba y gemía por comer más carne humana. El fuego nunca es el mismo, siempre
tiene nuevas maneras de cantar y bailar, de recrearse a sí mismo y al mundo,
porque todo es combustión. No es casualidad que en el infierno el fuego
predomine, porque así como es destrucción es vida, y lo antiguos sabían muy
bien eso.
Vi que los diablos con máscara
antigás venían hacía mí, alentados por un respetable hombre, vestido de frac,
ondeando la bandera de la paz. Eran
legión los hombres del infierno mundano. Y los gases eran rumor de actividad
militar, porque ¡nunca tendremos paz, mientras exista más de uno! El sólo
cambio de clima puede calentar los ánimos de tu mejor amigo, para volverse
ahora tu peor enemigo. Los de sangre se desconocerán y mirarán con terror sus
acciones, sus deseos de muerte consumados. Serán ellos lo que hagan el trabajo
sucio, mientras los reyes del mundo seguirán blandiendo sus látigos, mientras
se espabilan a mil por hora en busca de nuevos tesoros en el universo.
Yo grité, jadeé como perro
rabioso, -¡Déjenme, malditos! ¡Yo no estoy vivo! soy sólo una pintura-
Y-a no quiero ser pintura,
quiero ser real-
-Pero la pintura es más real que
mis zapatos, y tú petición es una orden para mí. Verás lo que es el mundo, y
serás una gota más del océano de lamentos- respondió
Vi un fondo negro, con la
naciente luz anaranjada, como si una puerta fuera a abrir en un arrebato de
violencia natural. Los tonos obscuros hacía palidecer el exceso de luz que emergía
por la parte inferior .
-Sí, es una puerta-
Y las risas a carcajadas parecían
escupir rabietas de decencia, de buenas maneras. Mientras con lloriqueos,
algunos clamaban por más muerte. Y sí, yo estaba caminando sobre cadáveres aún
frescos, el olor a muerte era cada vez más intenso, y las nauseas dominaron mi
sentido común. Mis manos parecían pegarse al suelo como si la gravedad fuera
más fuerte, y mi estado de embotamiento exigía respirar un poco más.
Allá había gente de la alta
sociedad riendo hasta la locura, con sus vestidos de alta costura, y sus gestos
de alta alcurnia. Pude reconocer a algunos que compartieron la Educación Básica
conmigo, allá estaba el más inteligente de la clase, por acullá el más apuesto
de la escuela, si es que se le puede llamar galantería a la capacidad natural
para hacer sufrir a los más tontos, y
por supuesto, alcancé a ver al que parecía más indefenso de todos, un hombre
ligero, grácil y parco, que sólo con un chasquido de dedos, hacía explotar un
continente entero, casi con la destreza que se necesita para pisar una
cucaracha sin que se quede pegada al zapato. Y también pude distinguir al más
palurdo de la clase, pero tenía el talento de poseer una gran herencia de parte
de su padre, lo que lo convertía en un verdadero estadista, de esos que no se
dan sino cada cien años. Por todas partes salían prostitutas respetables, de
esas que no se rebajaba a acostarse con cualquier miserable. A pesar de todo
reinaba un orden, como si no fuera posible la existencia de otra manera.
Yo soy hombre, yo también, soy
nación y soy oveja. ¿Quién es el pastor que nos llevará al matadero? ¿quiénes
lloran sin haber visto nada aún? El saber ahoga a los más desesperados.
"Es terrible morir de sed en el mar. ¿Tenéis vosotros que echar en seguida
tanta sal a vuestra verdad que luego ni siquiera apague ya la sed?"
(Nietzsche). El hombre busca conocimiento, pero el conocimiento es su propio
veneno, el conocimiento no es uno sino él mismo pero multiplicado en bocanadas de humo que se pierden, y aparece por allá, en
una chimenea de alguna casa bien afincada, desde lo alto de una montaña, en que
se acaba de ahorcar un hombre.
Míralos cómo se parecen, mira
como son hermanos todos, repiten las mismas palabras, las mismas frases, y le han
escrito un bonito himno al Señor Dinero. Mira cómo se matan, mira cómo entre
ellos se encubren, nadie tiene rostro, y sin embargo se parecen. El crimen es
anónimo, pero todos quieren seguir bailando, -¡Ah tú, no entorpezcas la fiesta!
ya tenemos un nuevo campeón y dentro de una semana serán las elecciones , ¿Qué
propones tú para quejarte de esa manera?
ya viene Navidad y tendremos muchos bizcochos de cadáveres frescos, a todos les
gustan los muertos, a ti también, ellos son oro y prosperidad jajaja, anda ven
hijo, yo te daré un consejo: humilla a tu mejor amigo, después, haz que lo
exhiban en televisión, yo te conseguiré el pase mágico, te pagarán muy bien por
ello, posiblemente el Papa te eleve a Santo. Malditos escritores están en las
cavernas, lo de hoy es la exhibición en HD.
Maldita sean, cuándo comprenderán los hombres que Hobbes tenía razón, no
podemos vivir juntos ni medio minuto sin hacernos daño-
Y aquí estoy, yo un remedo de
pintura, de una idea mal concebida, y dentro de poco seré menos que polvo.
What I see is unreal, I've written my own part, eat of the apple so
young, I'm crawling back to start...